El primer día se dedica a la simpática Pristina, la encantadoramente caótica capital de Kosovo. Al día siguiente, toca visitar el monasterio de Visoki Dečani y, después, viajar a Prizren para ver los puntos de interés otomanos y disfrutar de las vistas desde el castillo.
Tres días

Carol.k_in_HK_Shutterstock